1.- Aliméntate bien.
Olvídate de las dietas severas y mantente firme en estas pautas
- Agua/infusiones y café
- Leche y lácteos: una o dos porciones/día
- Zumo: vaso pequeño al día
- Evitar bebidas azucaradas
- Las grasas procedentes del aceite de oliva
- 25% cereales integrales
- Los vegetales deben cubrir el 50% de la ingesta
- El 25% del plato deben ser proteínas procedentes
de huevos, pescados, legumbres, carnes blancas y frutos secos
Recuerda tu plato diario:
- 25% cereales integrales
- 50% vegetales y frutas
- El 25% proteínas

No te obsesiones con el peso cada mujer tiene el suyo; y es, con el que te encuentras a gusto contigo misma

2.- Realiza actividad física.
Mínimo 10.000 pasos al día.
No realices actividad física durante las dos o tres horas previas a la hora habitual de acostarse
3.- Duerme bien.
- Cuando los alimentos se hacen coincidir con el ciclo luz-oscuridad, se promueve un metabolismo saludable.
- Si comemos durante la noche o a destiempo tendremos problemas metabólicos, contribuyendo a la aparición de obesidad, resistencia a la insulina, hipertensión, diabetes y enfermedad cardiovascular.
- Duerme 7-8 horas al día y mantente activa durante el día
- Si quieres hacer siesta que sea corta, un máximo de 20-30 min


4.- Evita hábitos tóxicos.
- El café, alcohol y tabaco contribuyen al aumento de riesgo de osteoporosis y enfermedades cardiovasculares, por lo que se recomienda evitar su consumo.
- También aumentan la frecuencia y severidad de los sofocos.
5.- Para un envejecimiento exitoso es necesario.
- Un buen estado físico y funcional.
- Un buen estado de ánimo y funcionamiento mental.
- Una buena interacción social y compromiso con la vida.

